Cómo seleccionar las mejores frutas y verduras para deshidratar

En este artículo le mostramos cómo deshidratar frutas y verduras. La deshidratación es una forma sencilla de conservar la máxima cantidad de nutrientes de los alimentos. Utilizando el equipo adecuado, puedes transformar tus frutas y verduras frescas favoritas en nutritivos aperitivos que se conservarán durante mucho tiempo. Conozca los fundamentos de la deshidratación y cómo hacer algunos deliciosos aperitivos con sus variedades de frutas y verduras favoritas.

1. ¿Qué es la deshidratación?

La deshidratación de las frutas se produce cuando éstas pierden su humedad y se secan mucho. Esto puede ocurrir cuando las frutas se exponen a la luz del sol durante mucho tiempo o cuando se guardan en la nevera durante mucho tiempo.

2. ¿Por qué deshidratar los alimentos?

Deshidratar los alimentos es una forma fácil de hacer que duren más tiempo. También ayuda a conservar los nutrientes y las vitaminas de los alimentos. Si vas a deshidratar algún alimento, esto es lo que debes hacer: Poner los alimentos en una sola capa en una bandeja para galletas o en una fuente de cristal. Poner la bandeja en el horno a 115 grados. Deje que los alimentos se deshidraten durante al menos ocho horas. A continuación, retire la bandeja del horno y deje que los alimentos se enfríen. Ahora, puedes guardar los alimentos en un recipiente hermético. Asegúrate de que el recipiente sea de metal para que no reaccione con la humedad de los alimentos. Si no es de metal, utiliza una bolsa de plástico forrada con papel de aluminio o algo similar.

Deshidratar los alimentos es una forma estupenda de asegurarse de que tú y tu familia tenéis alimentos sanos para comer. Es fácil de hacer y muy barato. Por cierto, no hace falta estar en el desierto para disfrutar de este método de conservación de alimentos. Puedes hacerlo en tu cocina. Te llevará más o menos el mismo tiempo. Sólo tienes que asegurarte de que la temperatura de tu cocina es constante. Si no lo es, tu comida no será tan buena cuando la rehidrates.

3. Cómo elegir el equipo

Hay muchos tipos diferentes de deshidratadores y cada uno se utiliza mejor para un determinado tipo de alimentos. Por ejemplo, puede utilizar un deshidratador de baja temperatura (90 grados) para frutas secas y frutos secos, un deshidratador de mayor temperatura (120 grados) para galletas y pan, y un deshidratador de muy alta temperatura (150 grados o 160 grados) para carne y pescado. A continuación le explicamos cómo elegir su deshidratador:

* Elija un deshidratador con el ajuste de temperatura más bajo que funcione para los alimentos que va a deshidratar.

* Elija un modelo con al menos 4 bandejas. Esto le ayudará a asegurarse de que sus alimentos se sequen de manera uniforme. Si los alimentos tienden a pegarse a la bandeja, no se secarán correctamente.

* Asegúrese de que las bandejas no tengan bordes afilados. Los bordes afilados pueden cortarle si se resbala y se cae mientras utiliza el deshidratador.

* Busque un modelo que tenga una función de apagado automático. Si el deshidratador no se apaga automáticamente después de un cierto período de tiempo, esto podría ser un peligro para la seguridad. No utilice un deshidratador si tiene una función de apagado automático.

* Asegúrese de que la tapa de su deshidratador esté bien asegurada.

4. Cómo deshidratar los alimentos

Existen dos métodos para deshidratar los alimentos. Puede utilizar un deshidratador de alimentos o un vaporizador de alimentos. Cualquiera de los dos métodos funcionará. La deshidratación mantendrá los alimentos frescos durante más tiempo. Puedes deshidratar tus alimentos incluso si los preparas con antelación. Puedes guardar tus alimentos deshidratados en un tarro de cristal. Lo mejor es envolverlos en papel de aluminio para que no queden expuestos a la humedad. Esto ayudará a mantenerlo fresco y libre de cualquier contaminación.

5. Cómo guardar los tentempiés

Para asegurarte de que no tienes ningún problema con el almacenamiento de tus aperitivos, intenta mantenerlos en un lugar fresco y seco. Si tienes un frigorífico, ese sería un buen lugar para guardar tus aperitivos. También puedes utilizar el congelador. Asegúrate de ponerlos en un recipiente de buen tamaño y etiquetarlo.

6. Experimenta con diferentes recetas

Lo siguiente que puedes hacer es experimentar con diferentes recetas. Cuando estés en un restaurante, puedes pedir una muestra de un plato que no hayas probado nunca. También puedes pedir un bocado de algo nuevo y luego pedir a tu camarero la receta.

7. Haga una lista de sus alimentos deshidratados

El siguiente paso es hacer una lista de sus alimentos deshidratados. Su lista debe incluir cosas como: frutas, verduras, carnes, panes, huevos, mantequilla de maní, frijoles, y muchos otros alimentos que probablemente come de forma regular. Puedes obtener gran parte de tu nutrición de estos alimentos. Sin embargo, es importante recordar que también debe comer algunos alimentos que no se encuentran en una dieta "normal". Estos alimentos incluyen: pan integral, arroz integral, avena, germen de trigo, salvado, semillas de lino, semillas de calabaza, semillas de sésamo, almendras, nueces, anacardos, nueces de Brasil y muchos otros. Puedes obtener tus vitaminas, minerales y otras cosas buenas adicionales añadiendo algunos de estos alimentos a los de tu lista. Es una buena idea añadir algunos "superalimentos" a tu dieta de vez en cuando. Algunos de los mejores "superalimentos" que puedes comer son: las bayas de acai, los arándanos, las bayas de goji, las cerezas, las uvas, las naranjas, las papayas, las piñas y la sandía. Pero ten cuidado con estos alimentos. No te excedas o puedes enfermar.

En conclusión, las mejores frutas y verduras para deshidratar son las que están en temporada. De este modo, tendrás una buena selección disponible para utilizarla siempre que la necesites. Lo mismo ocurre con todos los alimentos. Si compras a granel cuando están en oferta, puedes abastecerte de una gran variedad de productos. Al tener una amplia gama de alimentos diferentes a mano, siempre tendrás algo que ofrecer. Además, cuando compres frutas y verduras, elige las que sean más adecuadas para su almacenamiento a largo plazo. Es preferible comprar productos en buen estado, ya que es más probable que se mantengan frescos con el paso del tiempo.